Manifiesto de la revolución ecológica conceptual

El segundo volumen del proyecto “EuRICAA, revolución ecológica conceptual”, es el resultado del análisis del aspecto social de la crisis ecológica global y presenta un enfoque innovador para la solución de problemas que se mantienen y aumentan cada año.

En el primer volumen, llamado ”EuRICAA, modelo de un futuro pacífico” se expone la idea sobre la necesidad de preparar a la sociedad para cambios radicales, orientados a prevenir una catástrofe ecológica, mediante la unión de esfuerzos globales, orientados a desarrollar una economía “verde” en la construcción de la mega autopista infraestructural mundial única, que utilizará modernas innovaciones ecológicas. El concepto del primer volumen, se basa en el análisis fáctico del  estado desalentador del planeta a día de hoy. En el segundo volumen de EuRICAA, se refleja detalladamente el tema de la creación de una sociedad de cambios sociales: se ilustra con claridad las “enfermedades” más importantes de la humanidad del siglo XXI y se formula un código de estándares, que servirá como fundamento para organizar un nuevo modelo cualitativo de desarrollo social. Para transitar hacia un nuevo tipo de economía, la así llamada economía verde, orientada a garantizar la seguridad ecológica del futuro, es indispensable llevar a cabo una revolución tecnológica. Los países desarrollados, tomados como base para crear e implementar la mayor parte de las tecnologías existentes, deberán jugar un papel fundamental en dicha transición: es necesario elaborar y firmar un nuevo acuerdo mundial que cambiaría las normas que regulan la asignación de inversiones y subsidios dedicados a las innovaciones, con el objeto de establecer y desarrollar la nueva economía en los países en vías de desarrollo. Es indispensable revalorizar el concepto de éxito económico, basándolo en la correlación entre la tasa del crecimiento económico de los países y la protección efectiva, no la enunciativa, del medio ambiente.

Durante más de 40 años, gobiernos de diferentes países deliberan activamente sobre muchos de los temas concernientes a la manera de garantizar el futuro seguro de nuestro planeta; una prueba de esto es el aumento anual de los presupuestos y gastos encaminados a resolver los problemas ecológicos (ver el Apéndice 1). Sin embargo, siguen fracasando los intentos de cambiar y renovar la visión del mundo de los habitantes del planeta, de fomentar las ideas de anticonsumismo, orientadas a combatir el principal problema de la sociedad: la sobresaturación de la información y de los recursos consumidos. La motivación vital básica del hombre actual no se centra en el anhelo de garantizar la seguridad ecológica para un presente y un futuro armómicos, sino en alcanzar el bienestar material y económico personal, en lograr una posición dominante en el “mundo irreal de los símbolos”, que deben proporcionar prestigio social y felicidad. 

La mayor parte de los problemas sociales y ecológicos, pueden ser resueltos mediante una reducción substancial del consumo ilimitado, y reorientando a la gente a adoptar valores nuevos, reales. Para crear una sociedad civil en la que la felicidad de las personas y su autorrealización no dependan del consumo, donde éste deje de constituir el sentido de la vida, se requieren a veces cambios decisivos, por no decir radicales, en la consciencia personal y, sin duda alguna, a nivel gubernamental en cada país.

“EuRICAA, revolución ecológica conceptual”, permite a cada persona evaluar el estado actual de la comunidad humana y del efecto producido por sus acciones habituales, cotidianas, sobre el medio ambiente, y también sentir la necesidad de influir de manera personal en la crítica situación mundial. 

A nivel global, el problema de la conciliación de los nuevos estándares de civilización tendrá una importancia enorme, pero la decisión sobre su aplicación e implementación, será un gran bien para el logro del objetivo primordial: la protección de la Tierra y la preservación del futuro de la Humanidad.