Sección O. Administración pública y defensa; seguridad social obligatoria

* Sistema de influencia sobre la trayectoria de cuerpos menores del sistema solar (CMSS)

Todo sistema debe ser independiente de las condiciones externas, máximamente universal, debe utilizar la tecnología y la técnica existentes con fiabilidad demostrada y garantizar el desvío del cuerpo de la trayectoria de impacto. El resultado debe ser obtenido independientemente de la forma y velocidad del CMSS, de la dirección de su rotación, del material de su superficie, de su estructura y albedo. La masa principal del cuerpo deberá conseguir una velocidad adicional en la dirección necesaria, y los fragmentos, si llegan a formarse, deben ser de poco tamaño y volar también sin llegar a la Tierra.

Cálculos efectuados en múltiples ocasiones, muestran que el único método real de influir en la trayectoria de un CMSS es una explosión atómica. Esto está ligado, en primer lugar, con el gigantesco contenido de energía de los materiales atómicos (hasta dos o tres kilotones de equivalente de TNT por cada kilogramo de peso del artefacto) y la existencia de sistemas seguros y fiables. Los artefactos explosivos atómicos se construían en un comienzo, según parámetros dimensionales apropiados para ser enviados en cohetes; son relativamente baratos, se han experimentado muchas veces en la Tierra y el cosmos y están provistos de sistemas de seguridad para su transporte y almacenamiento.

Uno de los métodos más universales de acción es la explosión desde un vuelo que pase cerca del CMSS. La rotación del asteroide será prácticamente inexistente y, escogiendo el lugar de la explosión, se puede “empujar” el cuerpo en la dirección necesaria y disminuir la influencia de su forma en el resultado final. La apreciación aproximada de su efecto, que damos a continuación, está basada en la ley de la conservación del impulso, en la cual el asteroide se tranquiliza.

Ante la evaporación de la capa superficial de masa m producida por el estallido, y con una velocidad de despegue de vx , en un asteroide de masa M entra en acción la fuerza reactiva de retroceso, que le confiere una velocidad v. Se ha considerado un cuerpo de un diámetro de 200 m y una densidad de 3 toneladas/m3; al valor m (según los resultados de los experimentos en la superficie terrestre, en una atmósfera igual a la masa del equivalente de TNT de la carga, se han utilizado 106 toneladas, y vx – 500m m/s. Suponiendo que el estallido tendrá lugar a 50 m del asteroide, disminuiremos en 3 veces el ángulo corporal de impacto del estallido, en comparación con el caso conocido en una superficie plana, de lo cual resulta lo siguiente: v – m × v / M × 3 = 13,5 m/s; en la realidad, esa magnitud será un tanto (significativamente) mayor, ya que es indispensable tener en cuenta la influencia del componente relativista del estallido (la radiación electromagnética), que depende de las características concretas de la carga. Con una velocidad así, el asteroide se desplazará del radio de la Tierra 6,3 x 103 km en cinco días, lo que da una reserva de tiempo completamente sensata para su detección preliminar.

El cálculo que hemos propuesto es aproximado, ya que se han utilizado los valores “terrenales” m y vx.

La tecnología procurará a la Tierra una defensa completa ante los cuerpos cósmicos menores.

* El “cosmos digital”

La realización de la idea de un espacio cósmico digital, en el formato de una plataforma inofmativo-comunicativa, garantizará la formación y mantenimiento de una base de datos, accesible a nivel mundial y que aumenta sin interrupción, sobre los fenómenos, objetos y acontecimientos en el espacio cósmico. Al convertirse en un mecanismo de integración de los esfuerzos de los estados, de las organizaciones interestatales, de las organizaciones internacionales no gubernamentales y de organizaciones nacionales especializadas, de los operadores de aparatos cósmicos, el proyecto global “Cosmos digital” resuelve los problemas en el ámbito de la recolección, sistematización y prestación de información acerca de la actividad cósmica mundial, entre los que se incluye la obtenida por medio del monitoreo de objetos y acontecimientos en el espacio cósmico.

La implantación de la tecnología “Cosmos digital”, permitirá la defensa cósmica de la Tierra.

Continuación de la tabla 1

*Laboratorio móvil de control ecológico radioactivo y bio-médico (LMCERB), con base en un mini bus.

Posibilidades funcionales del laboratorio:

• Controlar la contaminación alfa/beta/gamma del medio ambiente (250 m2/h) basándose en nuevos bloques detectores portátiles resistentes como parte del equipo del laboratorio;
• Evaluar la contaminación alfa/beta/gamma de la ropa, el cuerpo, etc. de la persona, ante la aparición de ese peligro, con ayuda de una cámara de esclusas especial;
• Determinar sobre el lugar el grado de contaminación por nucleidos alfa radioactivos, de las vías respiratorias superiores, en caso de que se descubra la contaminación de la persona, con ayuda del nuevo endoscopio alfa radioactivo y detector gamma (diagnóstico preventivo);
• Llevar a cabo un diagnóstico exprés del estado funcional de la persona observada, basándose en un análisis computarizado de la variabilidad del ritmo cardíaco (VRC);

• Valorar la sensibilidad individual de la persona a la acción de los campos electromagnéticos de impulsos y microondas, siguiendo una metodología especial, con la ayuda de los aparatos correspondientes;
• Valorar el nivel de contaminación electromagnética del medio ambiente y su peligrosidad para las personas con sensibilidad elevada a las microondas;
• Cartografiar los datos del monitoreo ecológico radioactivo con ayuda del GLONASS (Sistema Global de Navegación por Satélite) y de sistemas GPS.

Esta tecnología permite controlar on-line el estado de la persona y del medio ambiente.